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viernes, 30 de septiembre de 2011

Somos Inteligentes por que Aprendemos!!!

Las Personas necesitan Creer en Ellas Mismas

Ocho hijos
¡Ocho hijos! Algo sabrá de crianza y educación este hombre: "A partir del cuarto hijo todo es fácil, pues entre ellos lo hacen todo: ponen la mesa, se hacen la cama, los mayores bañan a los pequeños...", me explica. Llega acompañado de su hija mayor (en la foto), "cuya inteligencia es normal, pero lee en 15 segundos una página de un libro". Alberca supo motivarla: "Los niños quieren leer desde los dos años... pero los frenan hasta los seis años. ¡Qué pena! Yo los incito, se sienten gratificados... y hoy leen mucho". Seguro que la chica ya ha leído Todos los niños pueden ser Einstein (Toromitico), libro en que Alberca aboga por el afecto en vez de la amenaza y la sanción para acabar con el fracaso escolar.
Todos los niños pueden ser Einstein?
Tus hijos pueden alcanzar cualquier logro intelectual.

Pero Einstein... ¡eso es picar muy alto!
Einstein fue carne de fracaso escolar hasta los 15 años. "Mortalmente lerdo", diagnosticó de él una profesora. "No está preparado para aprender, no llegará a nada", dijo otro.

¿Tan desastroso era?
Su propia madre decía que era retrasado mental. Hasta los nueve años no habló bien.

¿Qué le pasó para pasar a ser genial?
Lo que puede pasarle a cualquiera: motivación y método. Motivación: pese a haber suspendido, un profesor le invitó a asistir gratis a sus clases. Por primera vez, sintió que le valoraban, que creían en él. ¡Sintió cariño!

¿Asistió Einstein a esa clase?
Tuvo que irse a otra escuela. Pero allí un profesor de historia hizo lo que nadie antes: pedirle opinión sobre las cosas.

¿Esto motivó a Einstein?
Sí. Si sientes que confían en ti, ¡te creces, para ser merecedor!

¿Y qué es eso del método?
Usó el hemisferio derecho para resolver problemas del izquierdo. Visualizaba una solución, y su esposa le ayudaba a formularla matemáticamente. Pero era el hemisferio derecho, el intuitivo y creativo, el que resolvía, no el izquierdo, el matemático.

Yo lo pasé fatal con las matemáticas.
Tus profesores no valoraron el uso de tu hemisferio derecho: podrías haber acabado encontrando la solución, pero no te dieron tiempo. Todos los escolares pueden ser motivados y todos pueden triunfar.

Cada uno nace con su inteligencia...
El coeficiente de inteligencia es innato, permanece inalterable... y no sirve para nada. ¡Lo determinante es la motivación!

¿Cómo motiva usted a sus alumnos?
Les digo que todos pueden sacar un 10 conmigo. A partir de ahí, ¡un 5 les parece poco!

¿Tan fácil?
La escuela pone el foco en la sanción, fomenta el miedo al error. Debería ponerlo en el acierto. Y en la creatividad. Pregunté a mis alumnos: "De ocho caracoles de una cesta, salen tres, ¿cuántos quedan?".

Cinco, le dirían.
"Ocho –respondió uno–, porque han salido del caparazón, ¡pero no de la cesta!". ¡Es una respuesta que no debería ser penalizada!

Entre tanto, 30% de fracaso escolar.
Nuestra escuela parece reñida con la inteligencia. ¡Es imposible que haya un 30% de tontos! Desconfiamos de los alumnos, los educamos para evitar el fracaso y no para tener éxito. ¡Aprendamos a jugar al éxito!

¿A usted le funciona?
Desde 1993 sólo he tenido que suspender a dos alumnos. Me han reñido por aprobar tanto. ¿Por qué? ¿No está bien lograr estimular a los alumnos para que triunfen?

Pues aconseje a sus colegas profesores.
Sabed ser el jefe de la camada. Alguien a quien los alumnos quieran seguir. Que noten que tú les ayudarás a mejorar.

¿Algo más?
Sí: no olvidéis la grandeza de este oficio. Centraos en los por qué y para qué más que en los cómo. Y usad lo que hoy se sabe acerca del aprendizaje.

¿Qué se sabe?
Que somos animales emocionales, y que una simple mirada aprobatoria de un profesor... estimulará al alumno. ¡Sólo educa quien quiere a alguien! Si queréis a vuestros alumnos, educaréis. Si no, no.

Nada estimula más a un alumno que el afecto, me quiere decir.
Es así. Sonríe... y exige. Si tu hijo detecta que confías en él, querrá superarse. A los niños les atrae el reto, la heroicidad.

Los padres, ¿debemos ayudarles o no a hacer los deberes?
Si tu niño puede abrocharse el abrigo, no se lo abroches tú. Oriéntale en los deberes, pero dile que sabes que él los resolverá. Si se los resuelves tú, le enseñas a ser incapaz.

Si pudiera imponer una sola reforma escolar, ¿cuál sería?
Dedicaría toda la primaria a una sola y única cosa: ¡aprender bien a leer y escribir!

¿Y nada más?
¡Nada hay más decisivo! Si están bien avezados en la lectura, podrán estudiar lo que quieran: se abren la puerta a todos los conocimientos. Y cuantas más cosas aprendan leyendo, ¡más inteligentes serán!

¿No es al revés?
"El aprendizaje es experiencia, el resto es información", dijo Einstein. No aprendes cosas porque eres inteligente: aprender cosas te hace inteligente.

¿Y feliz?
Si de verdad eres inteligente, serás feliz.

¿Ah , sí?
La inteligencia consiste en resolver problemas, y el problema más difícil es ser feliz.

¿Puedo enseñarles a mis hijos cómo vivir felices?
Enséñales a superar obstáculos. A ver lo extraordinario en lo ordinario. A que todo acto tiene consecuencias. Y a amar de verdad.

¿Cómo se ama de verdad?
Sin esperar nada a cambio. Nada reporta tanta felicidad como hacer feliz al otro sin que siquiera se entere.

¿Haciendo eso nuestros hijos sean inteligentes y felices?
Dependerán menos de los azares y serán capaces de lo que se propongan. Y lo inteligente podría ser proponerse no estudiar una carrera.

domingo, 25 de septiembre de 2011

A los 9 años mi padre me Dijo No te rindas

A los 9 años, Cristina Montes (Sabadell, 1989) veía que las letras no le entraban ni con sangre. Captaba las palabras pero era incapaz de relacionarlas y perdía el hilo. Ella se esforzaba, sus padres se desvivían, pero no había forma. Le seguían lloviendo los insuficientes.

–Letras y números se le hacían una montaña.
-[Se emociona] Ufff... Cada día iba al cole sabiendo que no sería capaz de hacer lo que me pedían. No avanzaba. Mis notas eran espantosas. Solo aprobaba Educación Física y Arte. Mi autoestima estaba por los suelos. Me sentía permanentemente frustrada. En cuarto de primaria, un maestro le dijo a mi madre, delante de mí, que yo era «nula» para los estudios, que no era apta para la educación obligatoria y que la solución no era repetir. Lo mío sería un ir pasando.

–La condenó a un limbo escolar.
–A veces, cuando estaba sola en mi habitación, pensaba: «No hace falta que luches, no lo lograrás, siempre podrás acabar empleada en banca (el sector en el que trabaja mi padre)». Pero enseguida desterraba esa idea. Mi obsesión era que ningún otro niño volviera a sufrir lo que yo había sufrido. Quería llegar a ser maestra. Una maestra que no etiquetara a ningún niño.

–Un propósito singular. Podía haberse convertido en una rebelde.
–Mi padre me dijo: «No te rindas». Me transmitió su confianza y me cambió de colegio. Al marchar, le dijo al director que se habían equivocado conmigo, que yo era una hormiguita y que no me habían dedicado el suficiente tiempo.

–¿Funcionó el cambio?
–Comencé suspendiendo, pero poco a poco, con constancia, empecé a acoplarme. Me fui construyendo a medida que superaba los obstáculos. Hasta que vino otro golpe: mi nota de selectividad no me permitía entrar en Magisterio en la Universitat Autònoma, que era mi sueño.

–Menudo jarro de agua fría.
–Pero mis padres volvieron a decir: «No pasa nada». Sondearon las opciones privadas y me apuntaron a la Universitat Internacional de Catalunya (UIC). Hice Educación Infantil y Primaria a la vez. Obtuve los dos títulos en tres años, cuando lo habitual es sacarlos en cinco. Incluso me pusieron matrículas en Didáctica de la Matemática y Ética. ¡Lo deseaba tanto! El día de mi graduación fue el mejor de mi vida. Ver a mis padres ahí, sentados... Si había logrado eso, no habría nada que no consiguiera. Y quiero más... Ya tengo media licenciatura de Psicopedagogía.

–¿Cómo se explica el cambio?
–Ahora que soy maestra veo que yo tenía un problema de lectoescritura. No asenté bien las bases cuando tocaba y fui acumulando retrasos.

–El trabajo lo encontró sin demora.
–Cuando acabé en la UIC, el rector Salvador Vidal, encantado con mi entusiasmo, me dijo que una escuela de Alella buscaba un perfil como el mío para llevar una tutoría de tercero de primaria. Acepté y, desde la pizarra, era capaz de percibir a los que tenían dificultades. Una madre me escribió en una carta: «Lástima que no tenga una hija más pequeña para que pudiera pasar por tus manos, porque tú sabes dónde están las debilidades y las fortalezas, y cómo se pueden trabajar».

–Imagino cómo encajó el elogio.
–Con una enorme alegría. A mí nadie me motivó. Mi padre confió, pero ningún maestro me dijo: «Trabajaremos a partir de esto o probaremos con aquello». Tenía un nudo académico y emocional que nadie desenredó. Con el tiempo, he entendido que mi forma de aprender no era auditiva, sino más visual. Cuando empecé a estudiar a través de gráficos y esquemas, mi mente fue capaz de reconocer y relacionar.

–Todo esto le afecta aún, veo.
–He sufrido mucho. Y eso que he tenido mucha suerte, porque mis padres pudieron pagarme una universidad privada. Otros no la tienen.

–Por cierto, ¿qué fue de aquel maestro que la tachó de «nula»?
–Creo que lo echaron del colegio por darle una colleja a un niño. Pero prefiero quedarme con lo positivo: la satisfacción de dar respuesta a aquellos padres que se encuentran en la situación en la que se encontraron los míos. Etiquetar es muy malo.

–Es una manía generalizada.
–Cada uno tiene un estado madurativo. No existen los «nulos». Sus posibilidades están en el interior y solo hace falta explorarlas. Saldrán a su debido tiempo. También creo que para que un niño sea autónomo es importante inculcarle valores como el esfuerzo y la perseverancia. En mí está la prueba de su importancia.

martes, 20 de septiembre de 2011

Mayte Rius: La Importancia de Jugar y Relacionarse

Hace algunas décadas, los niños salían de la escuela, pasaban por casa a recoger la merienda y se marchaban a jugar a la calle con amigos y vecinos hasta la hora de hacer los deberes y cenar. Hoy, salen de clase y meriendan raudos mientras se cambian de ropa (muchas veces sobre la marcha, en el coche) o de mochila en función de si les toca ir a hacer deporte, a aprender inglés o a tocar un instrumento. “Para que pierdan el tiempo en casa, jugando o viendo la tele, mejor que aprendan algo o que hagan deporte”, defienden muchos padres. Pero jugar, según enfatizan los expertos, no es perder el tiempo. Muy al contrario, es un tiempo fundamental para el aprendizaje, una inversión de futuro, y la carencia de tiempo de juego tiene consecuencias indeseables. No es sólo que una agenda repleta actividades organizadas de 8 o 9 de la mañana a 8 de la tarde, de lunes a viernes y con extensiones el fin de semana (partidos, exhibiciones, etcétera) esté teniendo como resultado niños estresados, empachados de información y actividad, con dificultades para concentrarse o para la lectura, incapaces de disfrutar del momento y siempre preocupados por la siguiente actividad, por la próxima novedad… Es también que unos chavales absolutamente planificados y dirigidos por adultos no saben qué hacer y se aburren si alguien no les organiza el tiempo o el juego, tienen poca capacidad de decisión, escasa creatividad y nula propensión a inventar o descubrir, y les resulta difícil relacionarse, negociar con sus iguales, trabajar en grupo, autorregularse o resolver sus problemas solos.

“Cuando jugabas en la calle libremente, con otros niños y niñas, aprendías de forma natural a superar la frustración sin derivarla en agresividad –por ejemplo, cuando corrías poco y no te querían para jugar al rescate–, a dilatar la gratificación ¬no podías saltar a la comba hasta que te tocaba–, a relacionarte sin que los demás se plieguen siempre a tus caprichos… Si los niños juegan con sus padres, puede que estos les dejen ganar, jueguen a lo que ellos quieren o según sus intereses; pero en el juego entre chavales, si no sigues las normas te dejan fuera; si no te comportas bien o eres agresivo te quedas al margen…y así aprendes a integrarte”, explica Petra M. Pérez, catedrática de Teoría de la Educación de la Universitat de València. Y añade que cuando los niños jugaban más entre ellos de forma espontánea había menos problemas en el colegio porque fuera ya habían aprendido las reglas de interacción, el autocontrol y a dilatar la gratificación.

Claro que hoy los niños también comparten juegos con sus amigos en la escuela y en las actividades extraescolares. De hecho, muchos piden a sus padres que les apunten a extraescolares para ir con sus amigos, sobre todo cuando la alternativa es estar solos en casa. Pero la socialización que se desarrolla en estos entornos reglados, dirigidos, es distinta. Cuando hay profesores y monitores de por medio, “las normas vienen desde fuera, las actividades están regladas y dejan poco espacio a la creatividad y a la relación espontánea, y los niños no pueden aprender igual las consecuencias de lo que hacen o deciden”, apunta Petra M. Pérez. En su opinión, hoy que la mentalidad es preparar a los hijos para el futuro y la deseabilidad social es tener unos hijos exitosos y con estudios, “los padres deben saber que, más que aprender muchas cosas, sus hijos deben jugar, porque eso les proporciona aprendizajes básicos para el desarrollo de la personalidad, de su creatividad y de su capacidad de innovar y de buscar soluciones a los problemas”, que son habilidades imprescindibles para que luego triunfen a nivel profesional.

Purificación Sierra, profesora de Psicología del Desarrollo de la UNED, enfatiza que el juego espontáneo entre niños es un ensayo para la vida adulta y permite desarrollar las habilidades relacionales y emocionales que facilitan una vida social sana al hacerse mayor. Y por si alguien cree que ser más o menos sociable es baladí, Petra M. Pérez remarca que la falta de relación social durante la infancia está complicando ya a la vida a algunos jóvenes. “Hay muchos chavales, en especial hijos únicos, que de pequeños no han tenido relaciones de complicidad y de enfrentamiento con amigos y hermanos, y que al crecer recurren al botellón o se refugian desde los 13 años en una relación de pareja por miedo escénico a los iguales; lo veo también en algunos becarios universitarios con los que trabajo: jóvenes que se han centrado mucho en sus estudios pero no se han relacionado y no saben compartir ni desarrollar propuestas en equipo”, comenta.

Pero los argumentos de educadores y psicólogos en favor del juego no acaban ahí. Para quienes creen que lo importante son los conocimientos y que lo que prima hoy en la sociedad es estar preparadísimo, acumular muchos conocimientos y que los niños aprendan cuanto antes, más y mejor idiomas, música, ajedrez, informática, etcétera, puede resultar chocante leer Einstein nunca memorizó, aprendió jugando. En realidad es el título de un libro en el que las especialistas en psicología infantil Kathty Hirsh-Pasek y Roberta Michnick Golinfkoff echan mano de sus investigaciones para asegurar que jugar es igual a aprender, y que jugando se aprende de todo: desde a resolver problemas de forma creativa hasta capacidades matemáticas y habilidades lectoras.

Joan Doménech, director de la escuela Fructuós Gelabert de Barcelona y autor de Elogio de una educación lenta (Graó), advierte que, en educación, más no es sinónimo de mejor. “La capacidad de aprendizaje es limitada, y aprender es un proceso lento, que requiere sus tiempos: un tiempo de hacer, un tiempo de conversar o deliberar, y un tiempo de no hacer nada, de reflexionar; y ese último es el tiempo de juego”. Imma Marín, pedagoga y directora de la consultora especializada en juego y educación Marinva, lo llama tiempo de digestión: “Los niños de hoy reciben mucha información y muchos estímulos, es decir, comen mucho; pero tienen poco tiempo de relax para hacer la digestión y se empachan de exceso de actividad; porque para asimilar los aprendizajes y las experiencias, para que sirvan de nutriente, hace falta tiempo, y ese tiempo de digestión nos lo proporciona el juego: mientras juega, el niño puede interiorizar, poner en práctica y relacionar lo vivido durante el día y los conocimientos recibidos”. Y pone un ejemplo: “la ley de la gravedad te la explican en la escuela, pero la aprendes haciendo torres y construcciones de bloques que se caen”.

Doménech es tajante: “Los niños que no juegan no aprenden”. Y precisa que cuando habla de juego no se refiere a juegos didácticos o educativos, sino al juego lúdico, sin más. “Estamos colonizando el tiempo de los niños; su agenda es un reflejo de cómo ocupamos los adultos el tiempo, y queremos que todo sea organizado, que todas sus actividades sean desarrolladas con personal cualificado, siguiendo el modelo escolar; pero el aprendizaje más efectivo se hace fuera de la escuela, jugando, sin límites horarios, sin reglas…”, afirma el director de la escuela Fructuós Gelabert.

La psicóloga Purificación Sierra apunta que las actividades extraescolares han convertido un tiempo de ocio en una obligación infantil más porque tienen una finalidad, unos objetivos cuantificables y no son un mero disfrute en sí mismo. En este sentido, Imma Marín señala que “el juego es importante en la medida en que sea juego libre, en que los niños tengan un tiempo y un espacio psicológico en el que exista margen de error, donde no se sientan juzgados y sean libres de probar y experimentar; eso es fundamental, porque no se puede crear e innovar sin pasar por el error, pero la escuela y la sociedad castigan el error, y el único marco en el que puedes probar y probar, y pasar por fracasos sin que ocurra nada es el juego; porque el juego prima el proceso, como por ejemplo cuando un niño, sin ayuda de nadie, persevera una y otra vez para intentar bailar la peonza o hacer el pino”.

Tampoco es que los niños se hayan de pasar el día jugando a sus anchas con sus amiguitos; ni que el juego espontáneo y las extraescolares sean actividades excluyentes. Se trata de compatibilizar. “Lo importante es no sobresaturar a los niños con extraescolares para que tengan tiempo de juego espontáneo, en el parque o en casa, sobre todo hasta los diez años”, indica el psicólogo Benjamí Montenegro, del Equip Psicològic del Desenvolupament de l’Individu. El problema, según coinciden todos los expertos consultados, es que con frecuencia la elección de las extraescolares no responde a una necesidad o a un interés del niño, sino de la familia, ya sea para cubrir las jornadas laborales de los padres o sus expectativas culturales, deportivas, artísticas… Incluso los pediatras han intervenido en este debate instando públicamente a los padres a que “piensen en su hijo y con la cabeza” a la hora de pedirles un esfuerzo extra en idiomas, deportes o lo que sea. “Los padres no se deben plantear el desarrollo de estas actividades como una carrera contra reloj; deben pensar que los niños necesitan tiempo para descansar y para jugar y no sobrecargarles de obligaciones”, asegura una nota conjunta de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria.

Montenegro defiende la necesidad de organizarse para que alguien pueda recoger siempre a los niños a la salida del colegio para llevarlos a casa, al parque o donde sea, y así no elegir las extraescolares en función de que el horario vaya bien a los padres. Su criterio es que, hasta quinto de Primaria, lo mejor es una actividad de carácter deportivo, no competitiva, y, como mucho, otra intelectual (siempre que el niño no tenga problemas de aprendizaje en la escuela). Y, a partir de la ESO, su receta es una hora semanal de conversación en inglés y, como máximo, una extraescolar más –sea deportiva o intelectual– para dejar tiempo para el estudio y que vayan aprendiendo a estar solos en casa y a organizarse por sí mismos.

Imma Marín aconseja escoger extraescolares lo más lúdicas posibles, que no resulten competitivas ni se esperen de ellas resultados, y al mismo tiempo montar una red con familia, amigos, vecinos u otros papás para que, al menos una tarde a la semana, los críos puedan jugar con uno o dos de sus amiguitos en casa de uno o de otro.

En realidad, irse a jugar a casa de fulanito o de menganito era algo habitual, que surgía de forma espontánea y natural, hace unas cuantas décadas. A la vuelta del cole uno llegaba a casa acompañado y decía “mamá, que viene María a merendar”, y listo. Pero hoy, las jornadas laborales de padres y madres, los hábitos de vida, el urbanismo de las ciudades e incluso la tipología de las viviendas lo complica bastante más y obliga a organizar estas citas infantiles de antemano. En Estados Unidos se han puesto de moda, con el nombre de play day, y muchos padres y madres se organizan en su trabajo para, un día a la semana o cada quince días, acabar antes la jornada y poder recibir en casa a algún amiguito de su hijo o hija acompañado de su papá o su mamá. “En París algunas familias también celebran ya el play day: mientras los hijos juegan, los padres charlan y se toman algo”, confirma Marín. Es más que probable que esta vuelta a las viejas tardes caseras de juegos no sea ajena a la fuerte crisis económica que aqueja a los hogares. Pero, a la vista de los argumentos de los expertos, los beneficios que de ellas cabe esperar van mucho más allá de un menor gasto familiar. Si la práctica se extiende, quizá permita también contrarrestar el claro descenso del juego familiar y escolar que ponen de manifiesto los datos del Observatorio del Juego Infantil en España y que se atribuye, además de a la escasez de tiempo de los padres y al aumento de las extraescolares, al mayor consumo de televisión e internet ya que la compra de juguetes está muy limitada a los regalos de Navidad y Reyes.

Jugar, una necesidad vital y mucho más
Psicólogos y pedagogos no dejan lugar a dudas: el juego es una necesidad vital de la infancia, como respirar o comer. En las culturas primitivas ha sido siempre el principal instrumento educativo: jugando los niños aprendían de forma natural los valores, normas y formas de vida de los adultos, a controlar sus sentidos, sus movimientos y sus incipientes sentimientos, a explorar el mundo. Hoy, respecto a épocas anteriores, el juego es un bien escaso, a pesar de que nunca como ahora han estado estudiados y loados sus beneficios y contribuciones al desarrollo infantil.
Mejora la autoestima. Poder organizarse de forma autónoma, superar retos, ganar una carrera… y todo sin ayuda de adultos eleva la moral y enseña a resolver situaciones inesperadas.
Transmite valores. Insistir una y otra vez hasta dominar el yo-yo implica perseverancia. Jugar con otros exige compartir, ya sean ideas o propiedades.Y obliga a negociar, a pactar y a veces supeditar los propios intereses. También facilita el posicionamiento moral.
Da agilidad. Los juegos infantiles contribuyen a desarrollar actividades psicomotrices de todo tipo y muchos de ellos también trabajan la agilidad mental.
Socializa. Jugar supone aceptar las normas –ya sean las de una partida de chapas o las de una persecución de policías y ladrones–, acordar quién regulará las trampas, saber resolver conflictos, tomar decisiones en función de ciertos liderazgos o de la mayoría… Se aprende a interactuar con otros: a escuchar, a discutir, a pelearse, a reconciliarse.
Fomenta el autocontrol. Jugar con otros niños obliga a aceptar los límites que los demás imponen y a canalizar la frustración sin agresividad, porque si no aceptas las reglas o no te comportas de forma adecuada, los otros te dan de lado y no juegan contigo.
Fija los aprendizajes. Jugar permite a los niños asimilar y poner en práctica los conocimientos adquiridos, experimentar por sí mismos lo que en la escuela o en casa les cuentan y descubrir cosas nuevas.
Desestresa. Jugar es una fuente de placer y satisfacción, favorece la descarga de tensiones y da la oportunidad de expresar sentimientos y emociones. Jugando uno puede equivocarse sin miedo al castigo, sin presión por un posible error.
Es creativo. El juego permite el error, admite lo irreal, las incongruencias… Admite inventar personajes, construcciones o lugares inexistentes. Potencia la imaginación, la creatividad, la innovación.
Favorece la comunicación. Mientras los niños hablan de a qué jugarán, piensan y comentan la historia, reparten los papeles y se organizan para poner en marcha el juego, aprenden a expresarse y trabajan el lenguaje.
Enseña. El juego es un ensayo para la vida adulta. Y no sólo el juego simbólico, es decir, cuando se juega a cambiar de ropa a las muñecas, a comprar y vender, a médicos o a bomberos. También cuando se pactan los límites para el escondite, se discute porque alguien hace trampas con las cartas o se reparten tareas para hacer un castillo de arena se están ensayando recursos que serán fundamentales al crecer.

lunes, 19 de septiembre de 2011

1.-Proposito y Pasión

La pasión es el ingrediente básico para construir una forma de vida exitosa. La pasión es la fuente de inspiración y creatividad, refuerza la determinación, las esperanzas y las aspiraciones internas. Sin pasión, es muy difícil marcarse objetivos realistas y desarrollar planes para alcanzar esos objetivos
El propósito parte del deseo. Y luego lo tenemos que convertir en proyecto no basta con desear o anhelar hay que saber convertir deseos en realidades para dar lo mejor de nosotros mismos.
He puesto el Propósito como punto primero ya que creo que es importante tomar la decisión de que la Felicidad es una prioridad para ti. Y esto se debe de manifestar en la alegría, el buen humor, los pensamientos adecuados y las actuaciones adecuadas. Una vez decidida tu pasión es importante saber que hay que hacer para implementar y avanzar, sabiendo que tu pasión no es suficiente, hay que poner esfuerzo estratégico en los recursos y las oportunidades que le permiten manifestar tus sueños en una realidad. Es nuestra responsabilidad para convertirse en el catalizador que nos impulsa a comenzar a vivir la vida por nuestra propia creación. Es importante centrarnos con ilusión es nuestro compromiso. Y aquí es donde es importante dar autoridad al corazón.
La clave es que nuestros deseos sean los adecuados como la armonía de las relaciones o el sentimiento de progreso. Hay otros deseos que hay que ver como no tan positivos el culo veo y culo quiero o el deseo de la codicia consumista.
De ahí que yo prefiero hablar de propósito que de deseo.
Se firme en tus actitudes y perseverante en tu ideal.
Es muy importante saber lo que quieres. Es muy importante hacer lo que te gusta.
Es muy importante despertar los deseos adecuados ya lo dijo Platón que la finalidad de la educación es tener los deseos adecuados.
La vida es breve y única aprovéchala y disfrútala. Y vívela con alegría y sentido del humor.
En mi caso yo he tenido desde joven un compromiso con la felicidad y un propósito la felicidad.
Vivir lejos de tus sueños y de tus ilusiones no es vivir. Vivimos una sola vez y hay que echarle ganas y propósito a la vida. Abrázate a tus propósitos hasta que se hagan realidad. Vivir sin ellos no es vivir.
A la felicidad como destino y como camino no la podemos cambiar por nada.
Yo sí creo que se puede aprender a ser feliz y es uno de mis propósitos de la vida.
Y aquí hago un resumen de mis conclusiones.
Por eso dedico tiempo a mis aficiones y esto me hace sentir más útil y más pleno.
Es importante saber que viven en la vida tus sueños tus alegrías tu fuerza y la garra.
Al deseo hay que añadir el compromiso para tener un propósito y lograrlo.
Enfócate en lo que tu deseas tu felicidad y tu éxito.
Apuesta a ganar y lleva tus decisiones a la acción correcta, actúa en lo correcto.
Los deseos son las ganas de hacer o de tener algo. Los Sueños no dejan de ser una ilusión que te han de mover a actuar y ahí vienen la pasión y los propósitos que nos han de mover a hacer.
Merece la pena cumplir con nuestros sueños y para ello hay que soñar y definir tus propósitos. Solo existe una clase de éxito que es lograr vivir a tu manera. Y tú has de buscar cual es esa manera. Cuando el buen humor desencadena la risa y esto implica la liberación de tensión excesiva. Las emociones positivas, como alegría, buen humor, optimismo, paz, entusiasmo, son denominados estados de ánimo. Se manifiestan en el cuerpo como realidades bioquímicas que generan distintas respuestas que ayudan a combatir y hasta revertir algunas enfermedades. Algunos beneficios del buen humor y la risa son: Libera las hormonas endorfinas: cuando la glándula pituitaria recibe un estímulo generado por nuestra sonrisa voluntaria y consciente,...
Es importante focalizar la vida en lo que te interesa empiezas a tener un mejor trato contigo.
Y es muy importante si no te tratas bien a ti mismo no podrás tratar bien a los demás.

Y luego vivir con Pasión tu propósito con pasión y con perseverancia.
El Secreto de nuestro éxito solo podemos ser nosotros. Ni nadie ni nada pueden tomar esta decisión por ti. La Felicidad es por tanto como cualquier otra disciplina o materia una disciplina que necesitas aprender es una decisión que has de tomar y que nadie puede tomar por ti. Esto es clave cada uno en la vida tenemos que recorrer este camino y nosotros no podemos recorrer este camino por nadie.
Lo que sí es muy importante es que sepamos que la felicidad tiene poco que ver con los bienes materiales, no es más feliz el que más tiene si no el que menos necesita. La felicidad tiene mucho más que ver con ser que con tener.
Hay que buscarla dentro de nosotros mismos en la sencillez y en nuestro corazón. Y no en las cosas materiales. Cuantas menos cosas necesites mejor. En la vida no es más feliz el que más tiene sino el que menos necesita.
La Felicidad cada uno nos la tenemos que crear y definir ya que es un traje a la medida de cada uno de nosotros. Lo que nos hace Feliz a uno para nada nos hace Feliz a otros ya que somos muy distintos. Es algo que tenemos que asumir de lo que tenemos que responsabilizarnos. Si es muy importante entender lo distinto que somos los unos de los otros. Es una fuente de respeto.
Cada día has de ser capaz de fijar y de tener claro cuáles son tus objetivos. Conocer tus propósitos es un elemento esencial éxito. Lo primero en la vida es decidir lo que quieres hacer y una vez decidido has de decidir lo bueno que quieres ser en lo que quieres hacer. El Nivel al que quieres llegar en tu propósito.
Debes de Fijarte unos Objetivos de manera clara en la vida.
Para lograr lo mejor de ti mismo.
Las metas intermedias ayudan a enfocar la atención en tu propósito, en cada uno de tus propósitos.
“El mundo le abre el camino al hombre que sabe hacia dónde se dirige”
Te has de marcar objetivos muy claros.
¿Qué deseas?
¿Qué te apasiona?
Es muy importante tener claro lo que realmente te Ilusiona tu verdad cada uno tenemos una verdad un propósito y una ilusión distinta y
¿Qué buscas?
¿Qué te conviene?
¿Cómo disfrutas?
¿Qué te da alegría?
Sepárate de lo que te llena de negatividad.
Esta clave de la Felicidad a la que he llamado Propósito y Pasión está muy ligada a la segunda pero no es lo mismo.
Se puede tener un propósito muy claro y definido y se puede no tener Ilusión y Entusiasmo. LA La pasión es el ingrediente básico para construir una forma de vida exitosa. La pasión es la fuente de inspiración y creatividad, refuerza la determinación, las esperanzas y las aspiraciones internas. Sin pasión, es muy difícil marcarse objetivos realistas y desarrollar planes para alcanzar esos objetivos


Te has de repetir que puedes.
Es esencial creer más que nadie en ti mismo.
En la vida es clave tener la mejor Actitud posible.
La Actitud es clave para la Felicidad.
Cuando Piensas en la Actitud la puedes desarrollar o desglosar en distintos epígrafes:
1.-Proposito y Pasión: Saber lo que quieres
2.-Entusiasmo e Ilusión
3.-Actitud
4.-Fuerza Mental
5.-Confianza y Optimismo
6.-Realismo y Verdad
7.-Aceptate
8.-Ambición y Sueños
9.-Tratar a cada Persona como se Merece
10.-Las Palabras adecuadas.
11.-Aprender Armonía y aceptación
12.-Elogia


La Actitud en la vida lo es casi todo.
Pero nada va a cambiar si tu no cambias.
Has de incorporar toda una serie de hábitos positivos
-Optimismo
-Compromiso
-Actividad
-Sobreponerte al sufrimiento
-Disuelve el sufrimiento psíquico.
-Tomarte las cosas de la mejor manera posible
-Mucho realismo
-Saber que la vida es dura
No existe nada mágico con la actitud mental positiva.
Y no cambia la realidad de las cosas
Ni evita que nos lleguen los problemas.
Los problemas hay que afrontarlos de la mejor manera posible.
-No rendirte
-Nada se logra sin entusiasmo.
-Gestiona tu ánimo
-Ten buen carácter
-Sonríe
-Anima

Para ser Feliz se necesita tener un propósito en la vida.
Es clave saber lo que quieres.
Profundizar y avanzar en lo que te Gusta.
Avanzar en la escala o escalera de tu interés.
Tener fuego en nuestras almas y corazones
Porque no estás solo
Una ilusión por la que luchar, algo que hacer que de manera profunda e intensa nos motive.
Yo he llamado a esta sensación la de haber ascendido la escalera del interés y de la vocación
Para las personas es muy importante descubrir lo que nos gusta e identificarnos con ello.
Uno ha de estar identificado con lo que hace.
Descubrir lo que te gusta
Y dedicarse a ello
Hay muchos autores que tratan este tema:
Janet Astwood en El Test de la Pasión
Wayne Dyer La Fuerza del propósito y la Fuerza del espíritu.
Deepak Chopra en las Leyes Espirituales del Éxito
RICK WARREN UNA VIDA CON PROPÓSITO
Bertrand Russel
Victor Frankl Una Vida con Sentido
Stephen Covey: Los Siete hábitos de la Gente Eficaz
Stephen Covey dice que hay que ser proactivo y que trabajes con un objetivo en tu mente
Y cuando dice que primero lo primero hay que tener claro lo que queremos
Jack Canfield El Test de la pasión y Sopa de pollo para el Alma
Michelle Nielsen Tener un propósito es clave para conseguirlo.
Donald Trump: Piensa en grande
Anthony Robbins: Desata tu energía Interior
John Maxwell: El ABC del éxito, Las 21 claves del liderazgo.

Mario Benedetti: No te rindas
No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.
Mario Benedetti
No te rindas
Camilo Cruz y Actitud Mental positiva
La actitud mental positiva es una gran fuerza interna que nos ayuda a conquistar la felicidad.
-Madruga
-Cuida tu respiración
-No te afecte el clima
-Ganas de luchar
-Entusiasmo.
-Optimismo
-Compromiso con tus Metas
-Cuida tu alimentación
-Se generoso
Nuestros pensamientos son energía y vibraciones.
Y hacen cambiar el campo cuántico. Cuanto más optimistas y mejores sean mejor influiremos sobre la vida.
El verdadero derrotado es la persona que pierde el optimismo y el entusiasmo.
Y el optimismo y entusiasmo se pueden acrecentar y vivir día a día.
Tenemos que procurar desarrollarlo a base de hacer lo que nos gusta y de conseguir logros.
Para mejorar has de afectar a lo que todo rige el campo cuántico.
El propósito es la capacidad de unir mente y corazón de ponerlos a trabajar en equipo. Por un lado el propósito nos permite poner a trabajar más y mejor al cerebro y sintonizarlo con el corazón. Son personas que además de desarrollar las 2 partes del cerebro. El Hemisferio derecho y el Izquierdo. Luego además son capaces de desarrollar una Visión de Visualizar su propósito. No dejes de trabajar por tu objetivo. Lo importante será que enfoques todos tus esfuerzos en una sola meta. Trata de no desviar tu atención por otro lado, ya que te restará energía y visión de perspectivas de ese algo que al final, puede resultar altamente enriquecedor.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Regalar Reconocimiento, Ser Comprensivo y Ser Generoso

Recuperar la confianza en el amor. Las rupturas afectan a la seguridad y la autoestima, es necesario sobreponerse para empezar de cero.

Ser comprensivo. El pasado existe, no se puede borrar. No hay que pretender anularlo sino entenderlo e integrarlo, con sus obligaciones y relaciones afectivas, para ser capaces de empezar una nueva etapa.

Ser generoso. Cuando se ha tenido una experiencia negativa previa, se tiende a ser egoísta con el tiempo y con el dinero. Las negociaciones de los divorcios suelen recrudecerse cuando se toca lo económico. Lo material se manifiesta como una forma de venganza.

Dialogar. En las segundas parejas el dialogo es, si cabe, más importante que en las primeras. Tener presente lo que salió bien y lo que salió mal en la anterior relación y hablarlo evita interpretaciones erróneas y situaciones difíciles.

La Armonia es Clave

‎"Una familia es una relación entre varias mentes diferentes. Si esas mentes se aman entre ellas, el hogar será tan bonito como un jardín de flores. Pero si esas mentes no viven en armonía, será como una tempestad que arrasa el jardín.

martes, 13 de septiembre de 2011

La Inteligencia se Contagia: Seguro

Vivir en un entorno intelectual estimulante puede hacer mucho por las habilidades verbales, matemáticas y el razonamiento de los chicos y chicas adolescentes. Lo acaba de demostrar un equipo de investigadores españoles gracias a un estudio con más de 2.000 menores de Granada, Madrid, Murcia, Santander y Zaragoza.

Ruth Castillo, de la Facultad de Psicología de la Universidad de Málaga, es la autora principal de la investigación que ha contado con la participación de expertos del Instituto Karolinska de Estocolmo, el CSIC y la Universidad de Zaragoza.

"Las habilidades cognitivas o la inteligencia en la adolescencia predicen de forma importante la salud física y psicológica de un menor en un futuro... Además, los logros académicos se relacionan con variables positivas desde el punto de vista psicológico, como tener una mejor autoestima. Sin embargo, gozar de un menor intelecto en la infancia está asociado con problemas de ansiedad en la edad adulta", documentan los investigadores en su trabajo.

Publicado en el último número de 'Psicothema', el ensayo fue llevado a cabo con el fin de "explorar la relación entre la educación de los padres y su profesión, el tipo de colegio y las habilidades cognitivas de los participantes del estudio AVENA (Alimentación y Valoración del Estado Nutricional de los Adolescentes Españoles)", se insiste en el artículo.

Un total de 2.162 adolescentes de entre 13 y 18 años han participado en la investigación. A todos ellos se les realizaron pruebas de inteligencia que evaluaron sus habilidades verbales, numéricas y de razonamiento. Asimismo se analizó el nivel educativo y profesional de los padres. En este último apartado se examinaron tres categorías (directivo, trabajador cualificado o no, en paro o ama de casa) que se clasificaron como alta, media y baja. Se tuvo en cuenta, también, si la formación de los alumnos se llevaba a cabo en colegios públicos o privados.
Categoría profesional baja para las madres

Los datos revelan que el nivel educativo de las madres y de los padres fue clasificado como universitario en el 46% y el 51% de los casos, respectivamente. Donde más diferencias se produjeron fue en la categoría laboral. Así, esta fue clasificada como de 'baja' en el 53% de las mamás, aunque sólo en el 4% de los papás.

Los científicos concluyen: "la probabilidad de que los adolescentes tuvieran un alto rendimiento cognitivo y sus padres tuvieran un nivel educativo alto fue de entre 1,6 a 1,7 veces superior al de aquéllos con progenitores con bajo nivel formativo. Del mismo modo, las posibilidades fueron de 1,8 a 2,4 veces mayores para los adolescentes con padres de nivel profesional elevado".

En relación con el tipo de colegio, el ensayo desvela que "la probabilidad de tener mayor capacidad intelectual era 1,5 veces mayor en los que asistían a centros privados en comparación con los que se instruyen en públicos", declaran los científicos. No obstante, advierten en sus conclusiones que este "dato debe ser tomado con cautela, porque cuando se tuvieron en cuenta otros parámetros, esta diferencia no persistió", aclaran.

Defienden que sus conclusiones "coinciden con los de la bibliografía científica disponible". De hecho, "en general, los factores socioeconómicos parecen tener una influencia sobre el desarrollo cerebral, sobre todo en el lenguaje y en la memoria... Asimismo se ha constatado que un mayor nivel educativo de los padres se relaciona con una mayor atención del hijo y con una mejor adquisición del lenguaje y de la memoria".

En definitiva, los nuevos hallazgos confirman el papel que desempeñan los padres en la creación de un entorno intelectual estimulante.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Hacer Mi trabajo lo Mejor Posible

Un emocionado Pep Guardiola, distinguido con la medalla de honor del Parlament de Catalunya, ha agradecido "tanto honor", pero ha asegurado que él solo es un entrenador de fútbol. "No quiero ser ejemplo de nada. Solo vivo mi oficio con pasión", ha afirmado el técnico del Barcelona, que ha agregado que su "único mérito" ha sido el de "ser el elegido": "el mérito es de la junta de Laporta que en su día me escogió para ser el entrenador del Barça". El preparador azulgrana también ha lanzado un mensaje en clave de país: "Si nos levantamos temprano y nos ponemos a trabajar, somos un país imparable".


Al acto han asistido el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y del FC Barcelona, Sandro Rosell ATLAS
Guardiola, que ha admitido estar "fundido" emocionalmente después de las glosas de su persona de Evarist Murtra y Mònica Terribas, ha valorado que él también ha aprendido de mucha gente. "De todos los compañeros y entrenadores que he tenido durante mi carrera como futbolista. De todos he aprendido", ha destacado.

Un instante mágico
El entrenador, acompañado por toda su familia y muchos amigos, así como por la junta del Barça, encabezada por Sandro Rosell, ha explicado que uno de los actos más íntimos de su trabajo es cuando se encierra en un despacho situado en los sótanos del Camp Nou para preparar los partidos: "Todo se reduce a ese instante, a un momento que me hace muy feliz. Allí estudio al rival y apunto sus debilidades y puntos fuertes hasta que llega un momento acojonante y fantástico que apenas dura un minuto. Soy entrenador solo por vivir este instante. Es cuando pienso: 'Ya está, lo tenemos, mañana ganamos, pero no creáis que tengo una fórmula mágica porque también hemos perdido algunas veces'. Luego me encargo de transmitir lo que siento a mis jugadores".

Guardiola ha agradecido a sus padres toda la educación que le han dado, pero ha agregado que también ha sido el "deporte, el microsistema que es un equipo de fútbol", lo que le ha enseñado lo que significa "ganar, perder, lo que hace mucho daño, y el levantarte una y otra vez después de una derrota". "Reivindico la maravilla que es el deporte", ha dicho Guardiola, que ha asegurado: "Cuando el equipo va mal, es responsabilidad mía".

Agradecimiento al Barcelona
El técnico azulgrana ha recordado una frase de Valero Rivera, exentrenador del equipo de balonmano: "Siempre decía que el Barça nos hace mejores a todos, no vivas nunca pidiendo nada a esta institución. Somos unos privilegiados", ha recordado Pep, que ha concluido con una sentencia: "No quiero ser ejemplo de nada, solo quiero hacer mi trabajo lo mejor posible".

En respuesta a las palabras de Guardiola, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha dicho: "Tú no quieres ser ejemplo, pero lo eres". El dirigente también ha hecho un símil con el momento mágico relatado por el técnico azulgrana, al decir que el suyo es constatar que "el país es capaz de parir gente tan sana y tan noble como Guardiola" .

martes, 6 de septiembre de 2011

Reunión de Primero de ESO

1.-Habito Diario de Estudio
2.-Que sean Autonomos
3.-Seguimiento Cercano
4.-Que asuman sus Obligaciones
5.-Sí al Esfuerzo
6.-Elogia el Colegio
7.-Elogia a los profesores

domingo, 4 de septiembre de 2011

Francisco Kovaks Aprendiendo a Ser Padres

El médico Francisco Kovacs se mostró ayer en el Club FARO tremendamente crítico con el sistema educativo actual y con el balance de tres décadas de la Logse. "Cuando un sistema educativo es malo, quien más lo paga es la clase media y baja, que no puede costearse un colegio mejor". Se mostró contrario a la "inmersión lingüística" y abogó por introducir en la educación la competitividad, teorías educativas de acuerdo a los conocimientos científicos y una evaluación continua de los resultados. El futuro del país –dijo– depende de ello: "O nos ponemos las pilas o pasado mañana hablamos todos chino".
Tras ser presentado por la periodista de FARO Selina Otero, el científico mallorquín explicó las claves del "método Kovacs", que consiste en potenciar las capacidades que el código genético otorga al niño, transferirle un ejemplo a imitar y rodearle de afecto. La base de este sistema es la estimulación temprana, incluso antes del nacimiento –con música, por ejemplo–, para que en el cerebro del niño se establezcan el mayor número de conexiones neuronales.
Kovacs, autor del libro "Aprendiendo a ser padres", señaló que el sistema educativo español se ha ido hundiendo en los últimos treinta años, sobre todo desde la entrada en vigor de la Logse [Ley Orgánica General del Sistema Educativo], como constata el informe Pisa. "El problema de la educación es que todo el mundo opina –apuntó–. Las opiniones hay que escucharlas por cortesía pero son irrelevantes: lo que importa son los datos".
Educación para la ciudadanía. Preguntado por esta materia, el presidente de la Fundación Kovacs, dedicada a la investigación y a la promoción de la salud pública, no supo si atribuir la asignatura "a la estupidez o a la maldad". "Si alguien tiene que adoctrinar a los hijos son los padres, que son los más interesados en el bien de aquellos". Denunció que en los colegios "el más gamberro es el campeón: el sistema le premia, pasa curso habiendo suspendido cuatro, y esa es la única forma de que el profesor se libre de él. A la hora de la verdad, la educación no es democrática", lamentó.
Bachillerato de excelencia. "Ha sido lo único bueno que he visto en el ámbito educativo en los últimos treinta años", dijo sobre esta iniciativa de la Comunidad de Madrid. Rechazó que esto implique segregar a los alumnos en guetos, como alega el Ministerio de Educación. "Los niños son voluntarios, superan un 8,5 de nota y así no les molestarán los gamberros".
Inmersión lingüística. Kovacs es contrario a que a los padres se les impida decidir si prefieren que sus hijos sean educados en el idioma regional o en la lengua propia de todos los españoles, y criticó que "muchos de los políticos que han impuesto esta situación la sortean enviando a sus propios hijos a colegios extranjeros".
Competitividad. También consideró perjudicial que la competitividad se haya erradicado en algunos colegios, hasta el punto de que –aseguró– "el deporte se considera malo porque es competitivo; en su lugar se fomentan los juegos cooperativos, pasarse la pelotita y nada más". Para Kovacs, la competitividad es inherente al ser humano. "Hasta los espermatozoides compiten para entrar en el óvulo, tenemos que competir para sobrevivir". Argumentó, además, que si al niño con grandes capacidades se le rodea de un entorno competitivo, con compañeros de igual o superior nivel, se evitará que se vuelva prepotente.
Matemáticas. El doctor Kovacs, que se licenció en Medicina a los 19 años, se mostró partidario del método Kumon de aprendizaje de las matemáticas, y recordó que éstas, al margen de que el alumno se encamine a las Ciencias o a las Letras, "ayudan a razonar bien".
Idiomas. Kovacs dijo que si le hablamos a un niño en dos idiomas diferentes a edad muy temprana, le confundimos. El experto recomendó "que el niño aprenda un solo idioma hasta que se maneje con él, y una vez que lo tenga claro, cuantos más idiomas, mejor".

Ser Padres es Muy Complicado

A todos nos gustaría tener hijos maravillosos
Muy preparados
Con muchas ganas de aprender
Con gran sabiduría
Grandes conocimientos
Una dicha de valores
Y no sabemos como hacerlo

Como Educan Los Padres: Kovaks

Educan los padres
En la universidad lo llamaban cerebrito Kovacs. Fue formado por su padre en técnicas especiales de educación temprana. Terminó sus estudios de medicina a los 19 años y se doctoró summa cum laude a los 22. Esa experiencia le ha llevado a desarrollar un método educativo que aúna la intuición paterna con sus investigaciones médicas que explica en Aprendiendo a ser padres. El método Kovacs (Martínez Roca). "Hay un error conceptual: el colegio forma, pero los que educan son los padres. Y el niño se convertirá en un adulto más o menos libre en función de la eficacia con la que asuma sus responsabilidades. Casi cualquier cosa que hace un humano necesita entrenamiento y formación".
En un entorno global competitivo, o aseguramos la educación de las próximas generaciones o hablaremos todos chino rápidamente.

¿Y qué significa educar?
De acuerdo con el conocimiento científico tres cosas: el niño debe estar rodeado de un entorno que fomente al máximo todas las capacidades que su código genético permite. No se trata de hacer nada artificial sino permitir que esa potencialidad fructifique.

No idiotizarlo, vaya.
En segundo lugar hay que rodearlo de afecto. Y en tercer lugar hay que darle modelos de conducta que pueda imitar y que le transmitan los valores que socialmente queremos, véase el rigor, la disciplina, la meritocracia, la justicia, etcétera.

Entendido.
El conocimiento científico demuestra que, al nacer, la mayor parte de nuestras neuronas no están conectadas entre sí. Se conectan o no en función de los estímulos del entorno, y cuanto mayor es el sujeto más difícil. Con lo cual, quien debería fijar el calendario educativo es el desarrollo biológico del niño.

Es usted un poco determinista.
Hay tres estereotipos. El primero es el del salvaje feliz, lo de que hay que dejar al niño que brote espontáneamente como las lechugas. Una educación no intervencionista no es educación, es agricultura. Y condena al niño a ser un fracasado toda su vida. No hay ninguna excusa para los padres vagos.

Radical.
Una vez que el niño ya tiene cierta edad (entre los 10 y 14 años), y empieza a tener una vida cada vez más autónoma en la que la influencia de los padres es cada vez menor, se encuentra con situaciones que son contradictorias a aquellas en que lo han educado.

Póngame un ejemplo.
Si al niño lo han educado bien en su casa, tendrá un concepto claro de la justicia: yo puedo predecir qué voy a hacer y qué me va a pasar, en función de lo que haga, mis padres me van a premiar o castigar. Pero cuando sales al mundo te das cuenta que hay cosas que funcionaban en tu casa que en el ámbito macro no funcionan igual.

¿Entonces?
También es necesario dotar en cuanto es posible al niño de un criterio propio, sólido y fundamentado para que pueda resistir el contacto con la realidad sin considerarse idiota ni abjurar de sus principios.

¿Y cómo se hace eso?
A través de tres claves: Formación, información y ejemplo. No basta con decirle al niño desde pequeño que la honradez es un valor positivo, debes predicar con el ejemplo. Si tú admiras a un ladrón porque preside un gran banco te estas contradiciendo.

Las contradicciones son inevitables.
Hay que darle información para que comprenda que no tiene que cuestionar sus principios sino sobrevivir en un entorno donde no siempre se aplican. Intentar aislar al niño en una burbuja es un suicidio, porque en cuanto el niño sale al mundo se lo comen.

Glups.
Hay que prepararle para que cuando tú ya no estés tan presente, sea capaz de autoeducarse constantemente. Es lo que deberíamos hacer todos los adultos.

Usted bombardea el sistema educativo.
Año tras año, cuando salen los resultados del informe Pisa, el director general de turno o la ministra, si las elecciones están cerca, hace dos declaraciones tópicas típicas y hasta el año próximo. Con este planteamiento el fracaso está garantizado.

¿Qué propone?
Volver a implantar valores y mecanismos educativos contrastadamente eficaces y dejarnos de experimentos pedagógicos. Por ejemplo deberíamos agrupar a los niños por nivel, no por edad biológica. Eso de que los niños crecen industrialmente y el que nació el 31 de diciembre le corresponde otro nivel del que nació al día siguiente es una aberración que sólo cabe en la cabeza de los que perpetraron la Logse.

¿Qué más?
Instalar mecanismos de premio y castigo (que no significa tortura y mimo) que es como funciona nuestro cerebro. Si tratas igual al que estudia que al que no lo hace, estas incentivando que todo el mundo suspenda.

Aboga por una educación tradicional.
Estamos en un entorno políticamente correcto y blandito que nos está llevando al hundimiento colectivo. Ahora por ejemplo la competitividad no está de moda. Pero vivimos en una sociedad globalizada, la competencia está y hay que aprender a manejarla. Aprender a competir es no abusar cuando ganas ni frustrarte cuando pierdes.

¿Qué pasó entre usted y su padre?
Me permitió hacer lo que yo quería siempre que estuviera a la altura: si quieres tocar el piano, te comprometes a hacerlo lo mejor que puedas. Si pretendes ser libre tienes que demostrar que eres digno de esa libertad y que la ejerces bien. No ganas derechos por el hecho de crecer biológicamente.

Interesante matiz.
Si el niño aprende a abjurar del esfuerzo no sólo lo conviertes en un vago, sino que mediatizas todas sus decisiones de futuro, siempre va a hacer lo que le sea más fácil.

Además de educadores, ¿podemos ser amigos de nuestros hijos?
Los padres pueden decidir ser amigos de sus hijos, pero tienen que ser conscientes de que los dejan huérfanos.

Pensamiento Ganador

Pensamiento Ganador

Predicar para Educar

Más que esperar a reprender has de Predicar
Aconsejar y repetir los caminos adecuados